LA CÚPULA DE LA IGLESIA CATÓLICA CONDENA REITERATIVAMENTE A LOS JUSTOS
Por: Erika Calanche Ramos. El mayor pecado de aquellos que integran la Cúpula de la Iglesia Católica según el criterio del autor, es que estos hombres quienes se hacen llamar “Padres” dicen lo que es bueno, pero no lo hacen; hablan de la pobreza y nos hacen llevar cargas morales por sus banales juicios, pero no levantan dedo alguno para ayudar a los débiles, menos, cumplen con la vocación humana de saciar con amor las almas que ellos injustamente oprimen con sus ceremonias. No se pretende en este artículo aseverar que todos los sacerdotes en su oficio son de esta limitada calidad humana, pues el mismo Dios salvará a aquel que desempeñe con tal moral, ética y valor el su rol de sembrar en la conciencia del ser la voluntad divina y la genuina tarea de dar la mano a todo aquel que en su paso la necesite. En este sentido, considero que todos los seres con o sin sotana debemos tener la capacidad espiritual para cumplir con las voces revolucionarias del más apasionado de